La multibiometría destaca como una de las principales tendencias en ciberseguridad para 2023

El uso de la multibiometría se ha convertido en una de las principales innovaciones en seguridad digital, con un importante potencial de crecimiento.

Por Eduardo Ferrazzi

Ante este escenario, las organizaciones se vieron impulsadas a adoptar sistemas digitales complejos y automatizar sus procesos, sin comprometer la calidad del servicio, a la vez que atienden las nuevas necesidades y requerimientos del mercado.

A partir de ello, el uso de la multibiometría se ha convertido en una de las principales innovaciones en el sector de la ciberseguridad, con un importante potencial de crecimiento para los próximos años.

Esto se debe a que este proceso de adaptación digital ha expuesto las debilidades del sector, especialmente en Brasil. Solo en 2022, se registraron 19 millones de casos de ataques de ransomware, como lo demuestra una investigación realizada por SonicWall Capture, que ubicó al país como el segundo objetivo más grande de este software malicioso.

De esta forma, adoptar un sistema de seguridad es una inversión fundamental para prevenir ataques, ya que es mucho más costoso rescatar datos, e incluso el propio sistema, de grupos malintencionados.

Por lo tanto, más que contribuir a la seguridad preventiva, la adopción y dominio de una cultura de ciberseguridad también puede conducir a mejoras en la eficiencia operativa de las organizaciones.

La seguridad como prioridad: el papel de la multibiometría para el avance del sector

Actualmente, uno de los valores más valorados en el mercado es la ciberresiliencia, una importante medida de confiabilidad y eficiencia de las empresas.

El término se refiere a la capacidad de un sistema para preservarse frente a las crisis, además de soportar nuevas posibilidades, al tiempo que posibilita una buena experiencia de consumo.

De esta forma, la automatización de procesos, con el uso de Inteligencia Artificial y  Machine Learning,  se convierte en un paso fundamental para dotar a los equipos de ciberseguridad de una mejor gestión de la protección de datos e información. 

Además, otra tendencia a tener en cuenta por parte de las empresas es el análisis del comportamiento de los usuarios.

El protocolo conocido como  Zero Trust  se basa en la premisa de desconfiar de los movimientos fuera del patrón habitual del consumidor. Después de todo, cuando se trata de seguridad, lo importante es comprobar primero y confiar después.

En este contexto, destacan las tecnologías multibiométricas, que consiguen aumentar la seguridad de los procesos digitales -como el  Zero Trust-  , tanto para la empresa como para el usuario final. Esto se debe a que la multibiometría es capaz de ofrecer sistemas más completos que la tecnología biométrica simple.

La diferencia entre ambos radica en que un sistema multibiométrico es más completo en cuanto a pasos de seguridad.

Es decir, es posible incluir, en una misma implementación, servicios presenciales, digitales, de voz y, en algunos casos, de video, además de rastrear la ubicación del usuario en el momento exacto de compra o acceso al sistema, en la misma implementación.

Desafíos de implementar  sistemas de seguridad

Sin embargo, el principal desafío al implementar estos sistemas de seguridad es el hecho de que muchas empresas ofrecen solo unas pocas soluciones biométricas, lo que somete a los contratistas a una verdadera “colcha de retazos”, donde cada solución es operada por una empresa diferente.

La implementación de un sistema diseñado de esta manera es, en la mayoría de los casos, costosa y riesgosa, ya que es un sistema más frágil en comparación con una suite completa.

Es decir, contratar diferentes soluciones biométricas y unirlas en un único sistema no es crear un sistema multibiométrico. Esto sucede solo a través de la implementación de un sistema que engloba todas las soluciones en su arquitectura, aumentando así la seguridad de la organización para la multibiometría.

De esta forma, en general, todas las organizaciones que tienen su espacio en el entorno digital están bajo la influencia de los avances en ciberseguridad. La madurez y la resiliencia digital transmiten al usuario final la estabilidad y preparación de cada negocio.

Por ello, las tecnologías multibiométricas se convierten en importantes aliados para ampliar la protección digital de las empresas, de cara a ofrecer servicios que entreguen diversos pasos de seguridad, con el objetivo de garantizar no solo la protección de los datos de la empresa, sino también de los usuarios.

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